viernes, 23 de enero de 2009

El curioso caso de Benjamín Button

Me había leído el relato original, pequeño, solo 10 páginas, del escritor F. Scott Fitzgerald hace unos días por cultura general, y entre la película y el cuento, lo único en común es la idea general y el título. Enlo personal, el cuento no me gustó, es arto mal trabajado, pero es justificable, solo era el segundo cuento que habia publicado Fitzgerald en 1922.
Por su parte, la película es una de las grandes obras maestras de esta década en todo aspecto, la historia, el temple y la delicadeza de la narración visual. Es un trabajo artístico que sin duda pasara a la historia.
Me encantó la forma original de narrar la experiencia de la vida, los caminos que algunos toman no son los mismos nuestros pero en algunos puntos nos encontramos, ahí está el detalle.
La búsqueda de la felicidad y el deseo de convertir nuestros sueños en realidad. Me sacó algunas emociones interesantes y me hizo cuestionar la vida, me movió algunas lágrimas y risas.
La edición es inmaculada, la fotografía sublime, las actuaciones impecables, de todos sinceramente.
La cinta es larga, pero no se siente, uno se involucra con los personajes y nos hacemos parte de su ellos, la música es adecuada.
El punto fuerte son los efectos visuales, los mismos, que al ser tan bien colocados no se notan, al igual que el maquillaje, sutil, mezcla de maquillaje virtual y real.
Sales pensando y filosofando, analizando tanto que te queda corta la hora para continuar analizando lo que se vio. Es amena, entretenida y aleccionadora. La recomiendo.
Y recuerden contar el número de relampagos que le caen a uno de los personajes para que rian un poco más...
No le pongo Chompipes, he de decir, por primera vez, que voy a esperar a que salga en video para comprarla, así de buena es.
Me da cólera admitir, hay veces prefiero ver una cinta “mala” pues escribir sobre ella, es más simple, que escribir sobre una obra de arte tan majestuosa como esta, pues las palabras para describirla son pocas…




El curioso caso de Benjamín ButtonSocialTwist Tell-a-Friend

5 comentarios:

Amorexia. dijo...

Tengo que verla a como dé lugar, gran historia sostenida por un gran actor...

wílliam venegas segura dijo...

Tiene otra lógica
WÍLLIAM VENEGAS
wvenegas@nacion.com

He aquí una película que pasa del género fantástico al melodrama, de aquí al drama y de nuevo a lo sentimental; lo hace con solvencia en el deslizamiento temático, con una puesta en imágenes sabia, hecha con la precisión del mejor relojero. Se trata de la cinta El curioso caso de Benjamin Button (2008), dirigida por David Fincher.
Este filme comienza como una broma grosera del destino: el nacimiento de un niño con la edad y presencia de un anciano y cuyo proceso es morir como un bebé. Pareciera que su vida va hacia atrás, pero no: lo suyo es solo una manera distinta de ir hacia el futuro. Suena raro, pero esta es la lógica del filme.
Fiel a ese raciocinio, se crea un mundo irreal, pero redondeado de principio a fin. La película estructura un lenguaje imaginario absolutamente coherente a cada paso del relato, magnificado este por la eximia puesta en imágenes de David Fincher. Lo irreal pasa así a la economía de lo real.
La película cumple maravillosamente con el concepto de Roger Caillois sobre el género fantástico: “Lo fantástico es la inesperada irrupción de lo inadmisible en el seno de la inalterable legalidad cotidiana”. A partir de un cuento apenas sentido en el filme, escrito por F. Scott Fitzgerald, el guionista Eric Roth le pone en bandeja al gran David Fincher un texto que este convierte en algo subyugante en la gran pantalla.
El director hace cine/arte con el mejor manejo de la sintaxis cinematográfica para crear un clima de amor, de cariño humano y de bondades eróticas en medio del artificio de lo fantástico. Lo emotivo se siente lícito y natural. La sensación estética, igualmente, se ofrece válida y seductora.
La dirección actoral se muestra muy pulida con todos y cada uno de los personajes. Hay extraordinarios papeles secundarios, amén de un fortalecido Brad Pitt. La fotografía es señera y la música nunca abandona el estado de riqueza emotiva que nos produce este largometraje. Su montaje pausado ayuda a la ligazón del relato.
Es cine con temple y es conmovedor a la vez, reposado, de diálogos inteligentes, como esas caricias que son introspectiva consumación del acto del amor. Filme para ver de manera repetida y admirar, incluso, en sus efectos especiales.

Pablo Vargas dijo...

Esta pelicula esta genial hermano. Creo que hay poco que agregar sobre lo que comentas, pero la verdad los actores se lucen en la interpretacion de esta gran pelicula. La pase genial en el cine. Muy buena!

PD: Me perdi el estreno de Revolutionary Road, pero el miercoles vamos por ella. Saludos!!

KagosaVampire dijo...

Tengo que decir que me encantó!!!!!
Concuerdo con ud, excelente película!!
100% recomendada

xwoman dijo...

Tengo un problema, me encanta Brad Pitt y por lo tanto, no podría opinar objetivamente respecto a esta película

Genial.
Saludos
:)