Solo grandes directores pueden darse el lujo de hacer películas cansinas pero puntuales. Quentin Tarantino es un director caracterizado por tres elementos básicos: guiones con giros constantes, toma larga y diálogos dispersos y verborreicos a manera de cotidianidad. Hay otros componentes flotantes los cuales son más amados por los fans que por la crítica: violencia gratuita, música de viejas producciones y repetidas alegorías al cine del llamado Clase ¨B¨.
Encontraremos todo eso acá. Además de una manipulación interesante de la historia y de sus participes dentro de toda esta ficción, un recordatorio simpático para los espectadores de que el cine sin importar lo que se narre no deja de ser solo quimera o alegoría nunca realidad.
La cinta como un todo pudo ser presentada con menor metraje, algunas de las tomas no eran necesarias o simplemente no aportaban nada, los personajes desaparecían en función de la escena y retomaban su lugar de forma simplista, sin embargo, si hacemos una autopsia de cada segmento de forma individual podemos afirmar que están realizadas con precisión formal y son dignas de análisis cinematográfico por parte de estudiosos del sétimo arte. Ensambladas, por otro lado, generan cierto tedio y hasta se siente repetitivo el ritmo de péndulo que presentan algunas veces.
Las actuaciones están muy bien, todas en general, y cada personaje concreta un carisma propio lo que le da cuerpo solido a toda la idea de la narración. Un lugar especial tiene el actor Christoph Waltz quien interpreta al cazador de judíos Coronel Hans Landa, impresionante, creo que no me equivoco al admitir que este personaje ha ingresado por la puerta grande de los personajes más malvados de la historia del cine, apenas para invitarlo a tomarse un vaso con leche…Malvado, terrorífico, sínico, encantador.
Finalmente quiero decir que me gustó mucho, puede que no sea muy querida por los fans, pero es de las mejores propuestas de Tarantino y sin duda dará mucho de que hablar en su análisis tanto desde lo formal como desde el rompimiento de algunas convenciones. No dejen de prestar atención a los detalles de fondo, magníficos.
Le pongo 1 Chompipe, es una muy interesante propuesta y las inexactitudes históricas son, a mi criterio, lo más delicioso, Tarantino reconstruye la historia en este mundo paralelo como hipérbole, un regalo a muchos. Divierte sin escandalizar.
8 comentarios:
Yo siempre he dicho que no soy fanatico de Tarantino, aunque si disfrute Pulp Fiction y Reservoir Dogs, sin embargo esta cinta lleva rato intentando seducirme, vamos a tener que darle la oportunidad, saludos!!
Esa hipérbole que decís yo la llamé sátira jeje... me pareció muy infantil y poco serio el final que le da a los del Tercer Reich. Es como una venganza tonta y despechada, hasta como para quedar bien con un pueblo alemán que tuvo como crítica central la supuesta "negación" del Holocausto, cosa que sería aberrante.
Tarantino es muy incocente aún, y está lejos de ser un gran director hasta tanto no se comprometa más con sus proyectos, y estos no queden como un simple jueguito de actores con guiones "paralelos" cuyo fin o justificación es "PORQUE AMAMOS HACER PELÍCULAS"...
Que no se malinterprete tampoco, no desmerezco al director, me parece interesante, pero no uno tan bueno como dicen. Tiene su chispa, pero nada más allá de eso. Todavía no ha hecho nada nuevo, mientras sigue haciendo odas a su cinefilia compulsiva jeje.
Igual me agradó la película, le puse un 6,50, que traducido a tu blog vendría a ser 2 chompipes si no me equivoco jeje...
Excelente la crítica ;)
SALUDOS!!!
Pasate por mi blog para comentar en mi última nota, te espero eh! ;) jaja
Un abrazo Antonio!
PM
No es una sátira, si sabes usar el termino, pues no implica comicidad del hecho. Por el contrario es una hiperbole pues quiere resaltar a toda costa que el hecho se dio exagerando el cómo, pero con el mismo resultado.. En fin, cada quién usa las palabras como las siente adecuadas decia Borges.
Por el contrario a lo que dices el final es el juego ludico de fintar con la realidad sin alterar los resultados a costa del espectador. Muchas buenas películas hacen ese juego, es un ejercicio de ubicación sobre la realidad y la fantasia del cine.
yo queria ir...
eso de ganarse entrada esta dificil...
:(
A ver... La peli de Tarantino no busca ningun mensaje moral, ni busca ser seria. De hecho, que uno la vea infantil, es casi normal ya que no estamos viendo La Lista de Schindler...
Además, para pelis criticas sobre el Tercer Reich tenemos A PATADAS ¿pero cuantas pelis que jueguen con el humor negro tenemos sobre esa tematica? Muy pocas, y ya desde esa base, Tarantino sale ganando por hacer algo fresco.
Lo de las hiperboles... Y si, los personajes estan exagerados, algunos tirando hacia la satira como Hitler o Aldo Raine, y otros a lo maquiavelico como Hans Landa, pero hiperbolicos muchos. Y ese es el encanto de la peli a mi entender.
Estoy bastante de acuerdo con la critica, la verdad... Como fan, me parece de lo mejor de Tarantino. Si, soy de esos fans raros, pero es así. Y no, no creo que Pulp Fiction sea lo mejor de Tarantino, sorry xD
Nada más que agregar, simplemente veanla, sean o no fans del director, es entretenida, inteligente, socarrona y con una banda sonora que me parece excelente.
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Desde el momento en que aparece el actor Christoph Waltz en pantalla, como cazador nazi de judíos, ahí mismo, la película Bastardos sin gloria (2009), del polémico Quentin Tarantino, agarra un nivel de intensidad que lo estruja a uno contra el asiento. Sencillamente, es una actuación extraordinaria.
Por otro lado, Tarantino de nuevo hace lo que quiere con sus filmes. El gran director ruso Andréi Tarkovski dividía a los realizadores en dos: los que solo imitan realidades y, por otro lado, los que las crean para hacerlas propias. A estos últimos directores, Tarkovski los llamó “poetas del cine”.
A veces sobrevalorado, reconozco en Tarantino el valor de hacer cine como un acto de creación y convertirlo en lo que se llama “cine de autor”, o sea, ese cine de constantes que definen e identifican a un cineasta. Tarantino es un “poeta del cine”, aunque pase por los conceptos más ásperos, satíricos, violentos, locos y destemplados que uno pueda imaginarse.
Pues bien, Bastardos sin gloria logra mostrarse como una película magnífica desde el guion (del propio Quentin Tarantino), con atento desarrollo de las disímiles historias que se van aunando y con envidiable definición de personajes. Agreguen un diseño de situaciones que pasa por distintos estados emotivos para –así– provocar al espectador, punzarnos.
Entre la ironía, la tensión y el desenfado histórico para ver la Segunda Guerra Mundial, Tarantino logra los más inteligentes diálogos que hayamos escuchado en cine: son piezas literarias. El propio Tarantino parece descubrirlo y, en muchas secuencias, se aletarga innecesariamente (¡lástima!, pienso yo), con excesivas pausas, para que los diálogos tengan estampa propia. Son palabras salvajes, divertidas y chocantes, dignas de la gran sátira.
Con Bastardos sin gloria, tenemos una cinta que difumina muy bien los géneros cinematográficos y que se siente gozosa y mordaz con el buen uso de la música. Esta vez, aplaudo a Tarantino mientras le perdono sus excesivos Kill-Bills.
Esta peli… sería perfecta simplemente contada en menos de una hora… pero 2 horas y media de tal cantidad parlamentos Tarantinescos la vuelven un bodrio insoportable…
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