Cuando la vida real se vuelve prácticamente drama de telenovela nos bloqueamos a la imagen de que algo inverosímil está pasando.
Pero, la realidad es que esta historia, con sus giros dramáticos e intrigas a granel, nos deja caer la quijada ante la frialdad, maldad y desfachatez de las decisiones de la mayoría de sus protagonistas; lo mejor de todo es que son hechos reales, documentados y ampliamente estudiados por académicos. Así que como cinta histórica la recomiendo mucho, varios diálogos y expresiones fueron contextualizados para una mayor audiencia, pero esto no importa pues la idea central de lo ocurrido esta ahí.
Las hermanas Boylen, o Bolena, Ana y María se enfrascaron en una red bastante compleja casi a manera de los actuales culebrones televisivos, orquestada por su padre y tío, para elevar por medio de favores sexuales la decadente fortuna familiar y conquistar al Rey Enrique VIII obteniendo con esto títulos de nobleza. Grandes actuaciones de Natalie Portman, como Ana y de la hermosísima Scarlett Johansson como su hermana María.
La mayoría de cine histórico tiene hermosa fotografía, esta no es la excepción, pero ciertamente no es superior a otras producciones; de igual forma el vestuario. La música está regular pero ni se nota.
La actuación de Eric Bana como el rey Enrique es adecuada.
El valor fuerte del largometraje es el de presentar los hechos históricos en plato sencillo para toda una nueva generación de personas y que de esta forma se impregnen de toda esta locura acontecida en esa época, no alejada de muchas familias en la actualidad.
Me agradó, con excepción del sexo con ropa, la pasé bien y me sorprendí ante los hecho conforme se iban revelando, también esta cinta, puede ser tomada como una precuela, pero sin relación directa, de la película Elizabeth de 1998. Le pongo 3 Chompipes. Los amantes de la historia tendrán sentimientos encontrados.
Pero, la realidad es que esta historia, con sus giros dramáticos e intrigas a granel, nos deja caer la quijada ante la frialdad, maldad y desfachatez de las decisiones de la mayoría de sus protagonistas; lo mejor de todo es que son hechos reales, documentados y ampliamente estudiados por académicos. Así que como cinta histórica la recomiendo mucho, varios diálogos y expresiones fueron contextualizados para una mayor audiencia, pero esto no importa pues la idea central de lo ocurrido esta ahí.
Las hermanas Boylen, o Bolena, Ana y María se enfrascaron en una red bastante compleja casi a manera de los actuales culebrones televisivos, orquestada por su padre y tío, para elevar por medio de favores sexuales la decadente fortuna familiar y conquistar al Rey Enrique VIII obteniendo con esto títulos de nobleza. Grandes actuaciones de Natalie Portman, como Ana y de la hermosísima Scarlett Johansson como su hermana María.
La mayoría de cine histórico tiene hermosa fotografía, esta no es la excepción, pero ciertamente no es superior a otras producciones; de igual forma el vestuario. La música está regular pero ni se nota.
La actuación de Eric Bana como el rey Enrique es adecuada.
El valor fuerte del largometraje es el de presentar los hechos históricos en plato sencillo para toda una nueva generación de personas y que de esta forma se impregnen de toda esta locura acontecida en esa época, no alejada de muchas familias en la actualidad.
Me agradó, con excepción del sexo con ropa, la pasé bien y me sorprendí ante los hecho conforme se iban revelando, también esta cinta, puede ser tomada como una precuela, pero sin relación directa, de la película Elizabeth de 1998. Le pongo 3 Chompipes. Los amantes de la historia tendrán sentimientos encontrados.
4 comentarios:
Vamos a tomarla en cuenta para este fin de semana. Creo que tiene los ingredientes necesarios para una buena pelicula. Saludos!!
Un detalle sobre las actrices: Scarlett es buena actriz y hermosísima, como decís, pero Natalie la supera en ambos aspectos, jeje.
Un saludo.
El subjetivismo romántico ha tenido en la literatura inglesa su mejor expresión, sobre todo con las novelas de Walter Scott. En esta vertiente artística se toma el drama de algún personaje histórico para reproducir y analizar el estado de una nación más los hechos materiales que la manifiestan: se toma el dato y es trabajado entre la ficción y la historia.
También ha sido el cine inglés la mejor locución de esta narrativa en la pantalla grande; basta con recordar un título como Becket (1964, de Peter Glenville) en la cúspide misma del sétimo arte, con las inolvidables actuaciones de Richard Burton y Peter O’Toole. Hoy, el título que se estrena en Costa Rica es La otra (2008), dirigido por Justin Chadwick.
Es la historia de las hermanas Bolena, Ana y María, y de sus relaciones eróticas y amorosas con el rey Enrique VIII, relaciones convertidas en instrumentos de poder y de dominación, de lujuria y de ambiciones ciegas, de rupturas políticas y religiosas. Es uno de los capítulos más intensos de la historia inglesa.
Curiosamente, al filme se le nota la ausencia de esa intensidad dramática, no solo en los acontecimientos sino también en las conductas de los personajes, posiblemente por su énfasis en la belleza formal, aunque sí reconocemos que –en los momentos claves de la historia– la trama se expresa con pasión y con vehemencia.
Debemos reconocer aquí el papel de los elementos cinematográficos: la música siempre oportuna, la fotografía como registro histórico, el montaje (edición) puliendo el relato de lo innecesario y las elegantes actuaciones de Scarlett Johanson (como María) y de Natalie Portman (como Ana). Fina y exquisita la labor de la primera; sinuosa y febril la de la segunda.
Esas dos actrices le dan alma a la película y, gracias a ellas y a un guion coherente, es que nos permitimos recomendar La otra como buena película.
Tengo tantas ganas de ver esta pero no tengo tiempo y/o con quien ir :(
Es que las de Elizabeth me encantaron, me imagino que esta también...
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