sábado, 18 de abril de 2009

Locas por las compras (Confessions of Shopaholic)

Una borrachera inocente, de una adicta a las compras, la lleva a escribir un “gran” artículo sobre economía por error; así empieza este absurdo.
Tiene serios defectos, por ejemplo: los momentos de humor son más comparables a los sketches de Los Tres Chiflados, bastante comedia física y situaciones incomodas. Esos momentos, admito, te sacan una sonrisa, pero son forzados en el guión, es decir, se dan sin fluidez, parecen parches.
Las situaciones son tan repetitivas de otras comedias románticas que no falta más de dos neuronas para predecir lo próximo a ocurrir. Sin embargo, tiene cierto aire divertido por lo que la hace bastante entretenida.
Uno la pasa bien, aunque no es un discurso filosófico sobre el materialismo o mucho menos un aviso preventorio sobre lo que es vivir en crisis. Es solo una comedia que ensalza mantener los pagos al día, nunca menciona dejen de comprar o ahorrar como medios, es más la palabra "ahorro" solo se menciona una sola vez en la película y tenía que ver con tomar los ahorros para comprar un vehículo.
El otro mensaje que tiene es el de hacer lo que sea por obtener lo que se quiere…
Me pareció bastante entretenida, a pesar de las malas actuaciones. Isla Fisher le faltó fuerza en algunas escenas. Le pongo 3 Chompipes, creo que yo estaba de buen humor.
Los ojos de todas las actrices parecen de manga… eso es un dato curioso.



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1 comentario:

wílliam venegas segura dijo...

Un bestseller no es –necesariamente– buena literatura, pero sí es algo que se vende. Digamos que es literatura exitosa comercialmente. Tal es el caso de la novela "Loca por las compras" y sus cuatro entregas posteriores, para un total de ¡cinco novelas!: Loca por las compras en Manhattan, Loca por las compras prepara su boda , Loca por las compras tiene una hermana y Loca por las compras espera un bebé , escritas todas por Sophie Kinsella.

El cine, con su instinto parasitario, olfateó ese éxito y ahora nos trae a la pantalla grande la película "Loca por las compras" (2009), dirigida por P. J. Hogan, con el tratamiento de una comedia romántica y con la actuación de Isla Fisher, como Rebecca Bloomwood, la compradora hartamente compulsiva.

La trama. El argumento de este largometraje es bastante predecible y su historia gira en el mundo glamouroso de la ciudad de Nueva York. Es aquí donde Rebecca Bloomwood aparece como una chica muy divertida y muy buena haciendo compras, demasiado buena, quizás. ¿Por qué no hacer de la compradera en tiendas un asunto bastante divertido?
Ella sueña con trabajar en su revista de modas, su revista favorita, pero no encuentra el modo de meter la cabeza hasta que, irónicamente, consigue un trabajo como columnista en una revista económica publicada por la misma compañía.
Con su sueño a punto de cumplirse, Rebecca tiene que hacer los esfuerzos más increíbles para impedir que su pasado arruine su futuro.

En la versión para el cine de Loca por las compras , tanto el escenario como la nacionalidad de Rebecca han cruzado el charco y ahora están en Estados Unidos: de suelo británico al de un mundo más consumidor: el comercio estadounidense.
Los productores del filme insisten en que con esta cinta tenemos una fábula de nuestro tiempo, ya que es una mujer que intenta gastar menos, olvidarse de las tarjetas de crédito y dar un giro de 180 grados a su vida. Lo malo en el personaje principal, es que Rebecca no puede parar. Si encuentra una ganga tiene que comprarla.

El título original de la película es el de Confessions of a Shopaholic ( Las confesiones de una compradora compulsiva ). Funciona como para pasar el rato: ir al cine en lugar de ir a una tienda. ***************Lo demás lo apunta mejor Chamu con su crítica en esta blog, ahí los remito.